La playa de Matalascañas vuelve a tomar protagonismo esta semana en el blog de Turismo en Huelva por una temática novedosa y que está teniendo una gran aceptación. La propia Junta de Andalucía ha dado luz verde a una iniciativa llevada a cabo por la Asociación ‘El Burrito Feliz’ de Hinojos.
Esta iniciativa promueve que un grupo de tres burros con sus serones (alforjas) y la ayuda de un grupo de voluntarias de la asociación recorran desde bien temprano la costa de Matalascañas limpiando y recogiendo todo rastro de plástico y envases que el mismo mar ‘escupe’ durante la noche en la arena.
Esta propuesta, que ha tenido una increíble acogida a nivel mundial, no hace más que acercar a la naturaleza a sí misma, la propia coordinadora del proyecto, María Jessica Heredia, deja claro que disfruta enormemente viendo como los asnos no solo están tranquilos y sosegados durante su paseo, si no que también disfrutan de una experiencia enriquecedora. Estos ‘limpiacostas improvisados’ además son obsequiados después de su jornada con una recompensa culinaria especial para ellos por su gran trabajo.
Desde la propia organización nos destacan que los animales no sufren en ningún momento y que por otra parte el transporte que acumulan de residuos nunca supera los 6 kilos de carga, donde exclusivamente transportan plásticos, restos de pesca y algún extra ligero. Ellos mismos ni se dan cuenta de la carga que llevan. Además, el nulo coste medioambiental de este proyecto ha hecho que la propia Delegación de Medioambiente, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible del Gobierno andaluz en Huelva apoye de forma ferviente este proyecto nacido en la provincia.
Cristina Mariño, vicepresidenta de la asociación ‘El Burrito Feliz’ y una de las acompañantes de las voluntarias en estos ‘paseos ecológicos’ deja claro que, «las cosas están cambiando a mejor en la lucha contra la degradación del entorno de Doñana» además de opinar que «no es tiempo de mirar atrás sino de afrontar el futuro y protección de la naturaleza con ideas que generen ilusión y tengan utilidad real».
La comunidad turística de Almonte y Matalascañas muestra su total agradecimiento a esta propuesta y siempre durante los meses de gran afluencia también colaboran de forma activa en la concienciación del mantenimiento de nuestras playas. Un bien muy preciado por los complejos turísticos de la zona y que merece un cuidado especial por residentes y visitantes.